lunes, 27 de julio de 2009

La tercera dimensión ataca de nuevo


Grandes estudios y directores se vuelcan al cine en 3D, promocionando a viva voz un nuevo desembarco del cine estereoscópico. ¿Será esta vez una verdadera revolución?

La piratería, la crisis económica y el desarrollo digital parecen orientar a la primera división del cine hacia la experiencia audiovisual tridimensional como forma de recuperar el atractivo de las salas de proyección.
El recuerdo de los mareos y dolores de cabeza producidos por las tentativas anteriores, en los años 50 y en los '80, más parecido a una atracción de feria que a un hecho artístico, no desanima a los entusiastas que afirman que esta vez, gracias al avance del mundo digital, es la vencida.
Para Manuel Cristóbal, vicepresidente de la Asociación de Española de Productores de Animación (AEPA), es parte de la evolución natural del cine.
"Primero fue el sonido, luego fue el color, luego el sonido más elaborado como el Dolby y otros sistemas similares, después la proyección digital, y el siguiente paso es la proyección digital en 3D estereoscópico", opinó el productor en conversación con BBC Mundo.
"Es una forma en la que los cines dan algo que nadie puede dar, esa sensación de inmersión, ese espectáculo", añadió Cristóbal.
La infantería tridimensional
Monstruos contra alienígenas, punta de lanza de la nueva camada de sofisticadas producciones en 3D, es obra de la factoría DreamWorks, cuyo responsable de animación, Jeffrey Katzenberg, apuesta con entusiasmo por la "revolución 3D".
Pero no es el único.
James Cameron prepara su primera película desde Titanic, Avatar, íntegramente en 3D; los estudios Pixar están añadiendo la tercera dimensión a Toy Story 1 y 2; y Peter Jackson y Steven Spielberg ruedan en estereoscopía su trilogía de Tintín.
En Europa, Wim Wenders planea completar su película tridimensional sobre la compañía de danza de la coreógrafa recientemente fallecida Pina Bausch.
Jordi Llompart es el director y productor de la primera película de imagen real en 3D rodada en España, Un viaje mágico a África, que se estrenará a principios del próximo año.
Para Llompart, el cine en 3D hasta ahora se acercaba más "a un tipo de cine más de atracción, un tipo de cine más para buscar unas sensaciones, en las cuales lo importante era la espectacularidad de la sensación pero poco el argumento".
"Creo que ahora tanto la espectacularidad de las sensaciones como el argumento tienden a converger gracias a que hay varios realizadores, entre los que me encuentro, que pensamos que esta convergencia es muy útil para avanzar en el cine y para ofrecer al espectador algo nuevo que supone un paso más allá en la industria audiovisual, en el espectáculo y en algo tan simple y tan importante como es el hecho de atraer a la gente a las salas de cine", aseguró el director.